domingo, 21 de febrero de 2021

No te apegues a lo que te apaga

Tal y como indica la frase que da título a esta entrada, a veces, nos empeñamos en seguir intentando algo que no funciona, cuando lo fácil es soltar y dejar ir lo que no nos hace bien. ¿A quién le gusta vivir dentro de un continuo resentimiento? Si te sientes decepcionado, en tu mano está cambiarlo. Y es que como bien dicen, el ser humano es el único capaz de tropezar dos veces con la misma piedra. Sin embargo, vivir así, no nos hace ningún bien. ¿De qué sirve? Nadie te obliga a quedarte, mejor que tú mismo nadie te conoce ni te va a conocer (nunca se llega a conocer a nadie del todo). Por eso sal, huye, resurge. Y si lo hacen, párate y piensa que es tu vida la que estás viviendo, tú decides qué camino tomar, si quieres que decidan por ti o coger el timón de tu vida y redirigirla. Siempre hay algo bueno esperando y, si una puerta se cierra, siempre se abre otra, será por oportunidades... Busca las señales y sigue tu instinto, confía en ti y en tus posibilidades. Que el miedo no te frene y que no encuentres excusas para seguir aguantando porque no nacemos para sufrir, sino para reír y transformar el mundo con nuestra esencia, dando lo mejor de nosotros mismos cada día.

Por mucho que te empeñes en meter una caja en una botella, no podrás. No hay que insistir donde no es, hay que aceptar la realidad y busca otra salida porque siempre la hay, aunque no lo parezca. Todo lo malo se puede cambiar, no hay que aguantar y esperar a que las cosas cambien solas y vuelvan a ser como antes. Los recuerdos no son más que eso, recuerdos, sombras del pasado y no se puede vivir de lo que hemos vivido con anterioridad. Cada día es un día nuevo y una nueva oportunidad, nunca es tarde para volver a empezar. Solo necesitamos abrir bien los ojos, enfocarnos en lo que queremos, proponernos un nuevo objetivo, soltar lo que nos martiriza, apagar los malos sentimientos y empezar de nuevo con un aire fresco. 

La dependencia emocional va de la mano de una baja autoestima y no debemos darnos el lujo de mostrarnos vulnerables ante los demás día tras día porque entonces se aprovecharán y nos acostumbraremos a ser víctimas. Y no, actuar así no se puede convertir en costumbre. Cada persona tiene valor y si tú aún no has encontrado el tuyo, es el momento de hacerlo. busca lo que te ilumina y esfuérzate por sacarlo a la luz. En tu mano está, anímate a dar el paso. Lo mejor siempre esta por llegar.


Si hay una persona en la que tienes que confiar al 100%, esa eres tú. 
No necesitas aferrarte a nada ni a nadie para ser feliz o triunfar, tú brillas con luz propia.